Carla Montero: novela histórica para viajar con los sentidos
La autora presenta 'La dama de la niebla', novela inspirada en las pioneras de las carreras automovilísticas.

En la década de los años 30, mientras el fascismo y el nazismo iban creciendo en Europa, se vivió la primera época dorada del automovilismo. La primera generación de pilotos de carreras rompía récords y en ella participaban tanto hombres como mujeres, compitiendo en las mismas carreras. Ese momento y esas pioneras del motor es en el que se inspira La dama de la niebla, la nueva novela de Carla Montero, una historia de glamour con un personaje que intenta escapar de su pasado. Hablamos con la autora de esta obra y nos recomienda libros para viajar con los sentidos.
Video: entrevista y libros recomendados de Carla Montero

La dama de la niebla surgió por un descubrimiento casual que Carla Montero realizó gracia a un encargo. “Una marca de automóviles me contactó porque querían hacer una acción promocional para San Jordi y escribir una serie de relatos, y a mí me tocó la parte del relato histórico”, recuerda. “Investigando la historia del mundo del automóvil, me encontré con esa época dorada del automovilismo, en 1930, la época de los grandes premios, que son el antecedente de la Fórmula 1 actual. Y no solo con eso, sino con que había mujeres que competían en las mismas categorías que los hombres en competiciones mixtas, cosa que hoy no sucede. Empecé a rascar un poco la historia y me di cuenta de que tenía todos los ingredientes para construir una novela fantástica. Ese glamour propio de los años 30, esa emoción de las competiciones, la rivalidad, la amistad entre los pilotos, todo lo que hay alrededor de ello. Lo que me sorprendía era que nadie la hubiese contado hasta ahora”.

Así, Carla Montero se inspiró en mujeres como Hellé Nice o Lucy O'Reilly Schell para crear a Mila Kovac, la protagonista de su novela. “Está construida como un collage de las biografías de esas mujeres reales, que le han ido prestando sus rasgos más singulares, sus anécdotas en carrera más curiosas”, explica. “Yo necesitaba un personaje que se ajustase a la historia que quería contar, por eso no podía haber escogido una de las mujeres reales porque ella tiene su propio recorrido y su propia biografía. El hecho de que Mila sea ficticia me da la flexibilidad de poder utilizarla como quiero. A través de ella, hago un tributo a esas mujeres cuya historia es tan desconocida y al final, como sucede con la mayoría de las mujeres, que el relato masculino las deja en la sombra y más en un mundo como el del automovilismo, que es prácticamente territorio de hombres”.
Una isla en tiempos turbulentos
Para La dama de la niebla, Montero sitúa la acción en un lugar especial, la isla de Man. “Tenía varios elementos que eran fantásticos para esta historia”, apunta. “Primero, una tradición automovilística importantísima. Allí se celebra todavía el Tourist Trophy, de motociclismo en este caso, una de las carreras más peligrosas del mundo y que tiene mucha fama. Pero sobre todo, lo que a mí me gustaba era el hecho precisamente de que fuera una isla. Es un pedazo de tierra del tamaño de Ibiza, que está en mitad del mar de Irlanda, absolutamente aislado de todo. Porque, aunque depende de la corona británica, tiene su propio gobierno, su propio parlamento, su moneda, su idioma. Están como en un mundo aparte. Yo quería que los personajes se trasladasen a esa burbuja donde, por un lado, parece que huyen de esa tensión política que había entonces en el resto de Europa, pero también vienen huyendo de sus propios fantasmas, de su propio pasado. Y allí se van a encontrar un poco ilusoriamente a salvo”.
Allí recala Mila Kovac, un personaje con un pasado tormentoso. “Algunos dicen que Mila es la heroína de la novela, pero no es una heroína en el sentido clásico, de mujer perfecta que todo lo hace bien, que es maravillosa, fuerte, potente, no falla nunca”, señala Montero. “Es un personaje mucho más tridimensional, mucho más complejo, porque tiene por un lado aparentemente la fortaleza y la decisión, la determinación que le permite entrar en un mundo reservado a los hombres y además triunfar, pero en cuanto abandona el coche y abandona la pista, aparecen esos claroscuros, esas debilidades, esas dudas, esos miedos. Ese pasado que arrastra y que condiciona muchas de las decisiones vitales a las que se tiene que enfrentar cuando llega a la isla de Man. Porque, para ella, esa llegada a la isla es un punto de inflexión en su vida. Acaba de perder a su marido en circunstancias un poco extrañas. Las sospechas de esa muerte también flotan sobre ella. Y todo eso va a condicionar todas las oportunidades que se le presentan y las decisiones que tiene que tomar”.
Libros recomendados de Carla Montero
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Vamos a empezar con una contemporánea, en este caso voy a ir a Isabel Allende, porque creo que leer a Isabel Allende siempre es un acierto. Para mí es uno de los grandes referentes, no solo literarios en general, sino a nivel personal. Para mí su última novela, Mi nombre es Emilia del Valle, está muy en su línea. Es una novela fantástica, con ese contexto histórico tan bien trabajado. Y sobre todo, esos personajes. A mí me gusta mucho cuando el autor hace un buen trabajo de personajes, yo procuro hacerlo también. Y otra de las cosas que me gusta de la forma que tiene de escribir Isabel, y en este caso lo vuelve a hacer, es esa sensualidad que tiene en su escritura. Cómo es capaz de estimular las sensaciones de los lectores a través casi del olfato, del tacto.
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Si nos vamos a los clásicos, hay una saga que me encanta, que es la saga de los Cazalet, de Elizabeth Jane Howard. Bueno, la disfruto muchísimo. Tengo pendiente la última, me encantan. Cómo recrea los ambientes, una vez más las relaciones familiares, ese periodo de entreguerras, que es donde se sitúa la historia de esta familia. Son unas novelas que disfruto muchísimo.
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Voy a recomendar también el último libro que acabo de cerrar, que es Matar a un Riseñor, de Harper Lee, que era uno de los clásicos que tenía pendiente. Me ha encantado. Me ha gustado muchísimo la forma que tiene de abordar ese clima social de América previa a la Segunda Guerra Mundial, la relación con los hombres de color, con la esclavitud. Y sobre todo la mirada, el hacerlo a través de la mirada de una niña, me parece una forma de abordarlo muy bonita.
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Voy a acudir a uno de mis autores de cabecera, que es Stefan Zweig. La última que he leído es La impaciencia del corazón. Me ha gustado muchísimo. Creo que es un escritor nato porque no solamente hace novelas, sino que tiene biografías, pero me encanta la forma que tiene de narrar, de jugar con el lenguaje. Me gusta muchísimo. Y esta última novela, La impaciencia del corazón, que es una novela que ya el propio título te indica que es romántica, no es una historia de amor exactamente, pero es una novela romántica. Y la forma que tiene de abordarla me gusta muchísimo.