Libros breves que enganchan para leer en un solo día

La lectura tiene muchos ritmos. A veces, un mismo libro nos acompaña durante semanas, incluso meses. Son ocasiones en las que la lectura se convierte en un refugio, un escape de la vida exterior. En otras ocasiones, la lectura nos sumerge durante un breve espacio de tiempo en un tiempo y un lugar determinado. Son esos libros cortos pero intensos, que guardan mucho más de lo que parece en sus escasas páginas. Nos fijamos en esos libros breves que enganchan para leer en un solo día.
Libros breves que se leen de una sentada
Hay libros que crean un universo propio en el que la realidad tiene sus propias reglas. Por ejemplo, La infancia del mundo, la novela del argentino Michel Nieva. En una Argentina del futuro casi sumergida por el deshielo, asistimos a las desventuras del niño dengue, mitad humano mitad insecto. También Los empleados, de Olga Ravn, nos habla de un futuro complejo. En ella, humanos y humanoides conviven en una nave espacial cuando entran en contacto con unos objetos que les hacen replantearse su misión en el mundo.

Otros libros nos absorben a través de la atmósfera. En La desconocida, Rosa Montero y Olivier Truc lo hacen a través de una novela negra que parte del submundo de la trata de personas. En el caso de La malnacida, Beatrice Salvioni nos presenta a dos chicas que viven en los márgenes de la sociedad en los albores del fascismo.


Libros breves que nos hablan de nuestro mundo
También existen ese tipo de libros que nos atrapan por cómo reflejan nuestro mundo. Experiencias compartidas con los lectores que nos hacen ahondar en las propias sensaciones y vivencias. En Estás muy callada hoy, Ana Navajas parte de su propia vida para hablarnos de su condición de hija, madre y pareja, con todas las obligaciones y ataduras que ello supone.
Por su parte, Tove Ditlevsen se adentra en los territorios de la locura con Las caras, y lo que ella conlleva de terrible pero quizás también de liberador. Por último, en Los bloques naranjas Luis Díaz nos sumerge en las relaciones masculinas, la incapacidad para comunicarse y las oportunidades perdidas.

