Libros clásicos que enganchan para leer sin parar en Navidad
Títulos para leer o releer durante estas fiestas
Una de nuestras cosas favoritas de la navidad es que nos suele dejar bastante tiempo para la lectura. Cobijarse en casa con un buen libro y abstraerse del ruido es uno de los grandes placeres de esta época. Además, es un momento propicio para alejarse de las novedades y acudir a los clásicos. Para descubrir alguno que aún no conocíamos o para releer otros. Hoy seleccionamos una buena ración de libros clásicos que enganchan para leer sin parar en Navidad.
Clásicos que enganchan
Las historias y su poder hipnótico son tan antiguas como la capacidad de comunicarse. Un libro imprescindible sobre ese poder de seducción de quien conoce una historia es Las mil y una noches. Acercarse a él es descubrir de nuevo la esencia de la narración. Esta época también nos permite acercarnos a grandes novelas, en calidad y extensión. Grandes esperanzas, de Charles Dickens, es uno de esos tótems que nos embarca en una vida llena de peripecias, desde la necesidad a la aventura. Otro de esos libros sagrados es Moby Dick, la inmortal obra de Herman Melville que nos habla de la obsesión, de la necesidad de grandes tareas para el espíritu y del sentido de la aventura.
Clásicos para vivir grandes historias
Una de las novelas clave para la consolidación del género, el Tristam Shandy de Lawrence Sterne es un texto poliédrico, repleto de humor y que, aunque requiere tiempo, compensa con creces. Novela romántica por excelencia, Cumbres borrascosas es una obra que merece la pena recuperar cada cierto tiempo, con su historia de pasión y venganza. Y otra obra clave es Las olas, con su profundo retrato psicológico de un grupo de amigos durante apenas unas horas.
Para terminar, dos obras que nos llevan a la sociedad de Nueva York, ese gran centro de inspiración literaria. En La edad de la inocencia, Edith Wharton nos presenta las costumbres y pasiones de la alta sociedad de la ciudad, con sus códigos y sus deseos ocultos. Por su parte, John Dos Passos nos ofrece en Manhattan Transfer un fresco impresionante de la ciudad en la década de 1920, y sus continuos cambios y diferencias sociales.
