Libros de novela negra recientes que hielan la sangre

Una de las cualidades de una buena novela negra es la de ponernos en tensión. Esos momentos en los que la acción nos atrapa, y nos sentimos dentro de la historia, son unos de los más felices para los lectores. En especial, son esas ocasiones que nos ponen al filo de la tensión las que son más vívidas y recordadas. Por esa razón, hoy buscamos entre las novedades los libros de novela negra que hielan la sangre.
Novelas negras llenas de oscuridad
Los autores de novela negra recurren con frecuencia a las atmósferas oscuras para acrecentar la tensión de sus obras. En el caso del italiano Davide Longo, esta oscuridad viene tanto del paisaje como de la tragedia. Su Corso Bramad de El caso Bramard es un antiguo inspector de policía obsesionado con el asesino de su mujer y su hija que le atormenta enviándole cartas.

Una de las grandes autoras de la novela negra nórdica, Camilla Läckberg, regresa a las librerías con una obra firmada junto al mentalista Henrik Fexeus. La secta parte de la desaparición de un niño para unir de nuevo a la agente Mina Dabiri y al mentalista Vincent Walder. Y en Quebec sitúa Louise Penny a su inspector Armand, que en Casas de cristal investiga un asesinato en el que todo parece indicar a un extraño visitante como culpable.


Novela negra en castellano
El cadáver de un geólogo que aparece en la Antártida, con una herida en el abdomen, es el inicio de Un desierto de hielo. En ella, Maite R. Ochotorena lleva a un antiguo investigador de San Sebastián a involucrarse en este caso. En Malart, por otra parte, Aro Sáinz de la Maza cierra su tetralogía sobre los elementos llevando a su inspector Milo Malart trabajar en un asesinato perpetrado en un yate en alta mar. Por último, A doble ciego nos plantea un thriller de la era del big data, con unos hackers que reciben un encargo misterioso de una gran empresa farmacéutica.

