Los mejores libros para viajar a Nueva York
Leer nos hace vivir experiencias nuevas. Abrir un libro nos transporta a otras épocas, sensaciones y lugares. La literatura también conforma nuestra idea de ciertos sitios, aumentando su poder de atracción y su aura mítica. La ciudad de Nueva York, con su influjo inagotable, ha sido reflejada en innumerables ocasiones en la ficción. En esta época en la que algunos vuelven de vacaciones o no se pueden permitir ese lujo, seleccionamos los mejores libros para viajar a Nueva York.
Pocas novelas han reflejado mejor el sueño de Nueva York, con sus luces y sus sombras, como Desayuno con diamantes. La novela corta de Truman Capote, y su adaptación cinematográfica, han instaurado una imagen de la ciudad como una aspiración idealizada a veces imposible de alcanzar. Abrirse paso en una urbe como esa es parte también de La campana de cristal. En su novela, Sylvia Plath parte de sus propias experiencias para reflejar un aprendizaje vital doloroso.
Libros sobre la Nueva York mítica
Es la historia de Holly, una campesina de 19 años que llega al Nueva York más sofisticado con el deseo de pertenecer a la alta sociedad. La película es preciosa, pero el libro de Truman Capote es todavía mejor. El personaje es más seductor, y su conquista de la ciudad resulta más compleja y enigmática. El final también es más auténtico, no el de Hollywood que quisiéramos leer, pero es la realidad que nos confronta.
Libros de aprendizaje
Otras novelas de iniciación también han tenido el paisaje mítico de Nueva York de fondo. Quizás la más famosa de todas ellas sea El guardián entre el centeno, pero otras más recientes, como Algún día este dolor te será útil o La fortaleza de la soledad, exploran también el paso a la madurez desde la gran manzana.
Del aprendizaje de la vida y la soledad.
Es la revisión de ‘El guardián entre el centeno’. Sigue la estirpe de Holden Caulfield. Esas ganas de ilusionarse, esa angustia ante la realidad y la necesidad de cariño. La abuela Nanette es muy novelesca. Enamora. Lo mejor, las visitas a la psiquiatra y los diálogos. Y sí tiene notas de humor.
Libros sobre la Nueva York más dura
Nueva York, como muchas grandes ciudades, engloba mundos diversos. Por un lado, está la Nueva York del ascenso social, la ambición y el lujo. En La hoguera de las vanidades, Tom Wolfe refleja la codicia y las miserias de un estilo de vida. En esa misma línea, Bret Easton Ellis llevó un poco más lejos su reflejo de la Nueva York deshumanizada en American Psycho.
La primera novela del maestro del Nuevo Periodismo resultó ser uno de los mejores retratos escritos nunca sobre Nueva York, personalizada la ciudad en un yuppie rodeado de problemas legales, matrimoniales y económicos.
Por otro lado, también existe la Nueva York de la desigualdad, de la pobreza y la brecha racial. La experiencia afroamericana ha quedado reflejada en títulos como El blues de Beale Street, de James Baldwin, o Jazz, de Toni Morrison. Esa parte más dura e injusta también está en el centro de Última salida para Brooklyn, de Hubert Selby Jr., quizás una de las novelas menos complacientes con la realidad neoyorquina.
Nueva York, por último, ha alumbrado libros inclasificables. La Trilogía de Nueva York de Paul Auster se nutre del influjo de la ciudad para adentrarse en el misterio y la metaficción. Ciudad abierta, de Teju Cole, parte de la observación de la ciudad para crear un retablo emocional de la vida en un lugar tan mítico como complejo.
Porque cuando alguien disfruta de escribir, el que lo lee lo nota y disfruta también. Cómo cuenta el desconcierto de vivir, convirtiendo cosas cotidianas en mágicas. (Leonor Watling)