Una historia de la violencia en diez libros imprescindibles

La violencia está presente en la condición humana desde su propio origen. Hemos convivido con ella, la hemos sufrido y, en el mejor de los casos, hemos aprendido a controlarla, pero sigue ahí, en nuestro interior. La literatura, siempre dispuesta a ahondar en las partes más incomprensibles de nuestra existencia, ha explorado en numerosas ocasiones esta violencia. Unas veces para estirar los límites de lo aceptable, otras veces para entender nuestra naturaleza, los libros nos han mostrado la crudeza a la que podemos llegar como especie. Hoy trazamos una historia de la violencia en diez libros imprescindibles.
Libros sobre la violencia que escandalizaron al mundo
Uno de los autores más controvertidos de la historia, el Marqués de Sade exploró los límites de lo permitido en materia sexual, pero también del dolor físico. Los 120 días de Sodoma son, hasta hoy, una de las exploraciones más tenebrosas del abismo al que se puede asomar la especie humana. Mucho tiempo después, La naranja mecánica también generó un debate (y críticas) por el uso de la violencia. De la misma forma, la descripción de los asesinatos del protagonista de American Psycho, con toda su crudeza, hizo que la obra de Bret Easton Ellis fuera duramente criticada.


Jess Fabric, bajista: Este libro me dio una buena hostia. Tenía trece años, aún no había visto la película y acababa de llegar a un internado militar en el que perdí parte de mi adolescencia. Cayó en mis manos por parte de algún compañero, estaba subrayado y con muchas anotaciones. Me pareció alucinante tener que usar el glosario constantemente para traducir la jerga que usaban Alex y sus drugos. Pasé años hablando como ellos, menos mal que la desaparición de la adolescencia también se lleva muchas gilipolleces.

Libros que indagan sobre la violencia
Presentar al lector la parte más perversa de la humanidad es algo que muchos autores han querido explorar. En Meridiano de sangre, Cormac McCarthy introdujo a uno de los personajes más crueles y sanguinarios que recordamos, el Juez Holden. Desde otra perspectiva, Chuck Palahniuk ha indagado en distintos tipos de violencia, por ejemplo en su famosísima El club de la lucha.

A veces uno se acerca al concepto del miedo, el que surge del espíritu humano y que es capaz de lo peor y lo mejor. En Meridiano de sangre Cormac McCarthy se explaya a través de sus imágenes y personajes para dejarlo todo “meridianamente” claro.

Las novelas de Palahniuk huelen a sudor, son como decía "El Perich" supositorios con sabor a menta.
Las pulsiones más perversas, desde lo sexual a lo truculento, son una de las especialidades de Dennis Cooper, en novelas tan descarnadas como Contacto. Por su parte, Joyce Carol Oates se mete en Zombi en la mente de un agresor sexual para crear uno de los relatos más estremecedores de los últimos tiempos.


Libros sobre los efectos de la violencia
La representación de la violencia no solo se ha plasmado en los libros para intentar entender la parte más oscura del ser humano, sino que también sirve para mostrarnos sus efectos. El rastro de asesinatos cruentos que dejan los carteles del narcotráfico sirven a Don Winslow en El poder del perro para mostrarnos una realidad que existe más allá de los titulares de periódicos. De forma similar, en La virgen de los sicarios, Fernando Vallejo nos habla de la violencia estructural en Colombia. Por último, y en clave más personal que colectiva, Miguel Ángel Oeste muestra los efectos del maltrato familiar en Vengo de ese miedo.

Nos gusta tanto que nos lo hemos leído los tres después de recomendárnoslo entre nosotros. Excelente novela negra, sangrienta por momentos, llena de narcos y sus excesos. Ambientada en una época en la que EEUU se preocupaba más por retener determinadas ideologías lejos de sus fronteras que por cortar de raíz el problema de las drogas que entraban por toneladas en su territorio.

En un escenario de muerte inminente, él decide amar para sentir la plenitud de la vida. La Colombia más terminal bajo el ojo cínico de un burgués maduro que busca lo imposible, la ternura. Una novela que arrastra sin dejarnos respirar.