Código Notarial

Se presenta la primera edición del Código Notarial profesional, en la colección Códigos con jurisprudencia de Aranzadi. La obra incluye un completo comentario, con extensa nota bibliográfica y cita jurisprudencial, de la Ley del Notariado y del Reglamento Notarial cerrándose su edición en noviembre de 2009. Se recoge en ella, exhaustivamente, la doctrina de la Dirección General de los Registros y del Notariado en resoluciones dictadas en el servicio notarial, tanto en recurso como en consulta. Singularmente, son citadas, todas las publicadas desde 2002 hasta la actualidad, y un número muy relevante de las anteriores que conservan actualidad. Un gran número de resoluciones publicadas en recursos contra calificaciones de los Registradores son también citadas y comentadas. El anexo legislativo del Código Notarial comprende una selección de normas, administrativas, arancelarias, civiles, hipotecarias y mercantiles, complementarias del objeto principal del Código y dirigidas a la practica profesional. Se presta una especial atención a la normativa internacional, especialmente a la comunitaria, en orden al reconocimiento y ejecución de documentos notariales. Se describe, además, el contexto normativo de la normativa notarial hoy vigente, detallando sus antecedentes inmediatos, desde el Reglamento de 1944, parcialmente vigente, así como las herramientas de búsqueda, mediante índices analíticos y cronológicos. El momento en el que nace esta edición es particularmente importante. Por ello se aborda, con detalle, el comentario de los preceptos afectados por las sentencias del Tribunal Supremo, Sala 3ª en relación a diversos recursos contra la reforma del Reglamento notarial de 19 de enero de 2007. Especialmente relevante es el análisis de los fundamentos de Derecho de la sentencia de 20 de mayo de 2008, que anula importantes artículos del Reglamento reformado, lo que plantea problemas singulares en orden a la actividad notarial en determinadas materias, y requiere estudio detallado. La obra se dirige en primer lugar a los Notarios. Lo hace con la aspiración de ser un eficaz instrumento de trabajo en su quehacer profesional diario, complejo y creativo. Pero, también se dirige a los demás aplicadores y profesionales del Derecho. Especialmente a los Registradores de la propiedad y mercantiles, a los Jueces y Abogados y en general, su uso está recomendado a los estudiosos del Derecho privado.