Javier Cansado sólo recuerda estos 10 libros
"Como diría Freud, por algo será".
Javier Cansado es la mitad de Faemino y Cansado, el presentador de Ilustres Ignorantes, un tipo que lleva años arrancando sonrisas. Cuando en Librotea le preguntamos por sus libros favoritos respondió como solo podría hacerlo Cansado: “es difícil seleccionar diez libros que hayan marcado de alguna manera tu vida, sobre todo, como es mi caso, si no eres un lector ávido y además, como es mi caso, que según lee olvida. En realidad estos diez libros (doce) son de los únicos de los que me acuerdo y como diría Freud, por algo será”.Es posible que por eso aparezca en esta peculiar estantería la Introducción al psicoanálisis, de Sigmund Freud. Sin tener que recurrir a Freud podemos concluir que Javier Cansado se destapa como un lector ecléctico. De los tiempos de la universidad evoca las Ficciones, de Jorge Luis Borges. A la niñez le devolvió la lectura de La isla de las tormentas, de Ken Follet. Y para reconciliarse con los mismos autores que leían sus padres cita Novela de ajedrez, de Stefan Zweig. Cansado confiesa que “solo” ha leído cinco veces Ventajas de viajar en tren, de Antonio Orejudo. A los tres tomos de Los enemigos del comercio, de Antonio Escohotado, los califica como una “epifanía”. La Guía del autoestopista galáctico, de Douglas Adams, también está entre los libros recordados por el humorista. La de Adams es una de esas obras mutantes: primero fue novela radiofónica, después un libro, se transformó en serie de televisión, cómic y hasta toallas. Otros se cuelan en esta selección. Por un lado La tía Julia y el escribidor, la novela en la que Mario Vargas Llosa relata de forma ficcionada su primer matrimonio con una tía política catorce años mayor que él. Por otro lado está Una breve historia de casi todo, de Bill Bryson.Cerrando la lista está Las campañas de Napoleón, de David Chandler: “porque es la Biblia de las guerras napoleónicas, tema de mi mayor interés”, sentencia Cansado.
Javier Cansado sólo recuerda estos 10 libros
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Porque me trae recuerdos de la universidad.
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Porque es el ejemplo de lo que siempre se dijo, "instruir deleitando".
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Porque es la biblia de las guerras napoleónicas, tema de mi mayor interés.
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Porque es ejemplo de literatura prolija y me reconcilia con los autores que leían mis padres.
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¿Qué decir de estos tres tomos? Que son una epifanía.
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Porque simplemente es una novela deliciosa.
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Porque me devolvió a la niñez, a recuperar las aventuras que leía de niño.
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Porque reúne todo lo que me gusta, estilo, sorpresa, agudeza, sentido del humor... en fin, sólo la he leído cinco veces.
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Porque no se puede ser más divertido escribiendo.
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Porque es un pensador como la copa de un Platón.
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