Libros que todos los amantes de los animales deberían leer
Una selección de títulos sobre la amistad de humanos con miembros de otras especies.

Hay mucha gente que piensa que no hay amor más puro que el de un humano y un animal, una relación que va más allá de lo racional. Del mismo modo, la manera en la que nos comportamos con otras especies dice mucho de nosotros. Como decía Anatole France, "Hasta que no hayas amado a un animal, una parte de tu alma permanecerá dormida”. Otros autores optaron por una fina ironía, como George Elliott, quien en Middlemarch destacaba la amistad de los animales: “no hacen preguntas, no critican”. Seleccionamos algunos grandes libros que todos los amantes de los animales deberían leer.
Libros sobre la pérdida de un animal
Algunas personas no pueden entenderlo, pero perder a un animal puede ser muy parecido a perder a una persona querida. Esa sensación está presente en Los idólatras y todos los que aman, la novela que publicará este mes la joven escritora Adriana Murad Konings que comienza con la muerte del gato de una de sus personajes. También de un felino, esta vez real, nos habla Historia de un gato, de la ilustradora Laura Agustí, que es al mismo tiempo el tributo al gato que acompañó a la autora durante 17 años y un relato personal de todas las vivencias que le sucedieron en este tiempos.


Libros sobre la amistad entre humanos y animales
Que una persona y un animal pueden llegar a tener una relación que se puede llegar a considerar como amistad es algo que muchos y muchas que hayan convivido con un perro pueden atestiguar. En el caso de El amigo, la novela de Sigrid Nuñez, en la que una escritora se tiene que hacer cargo de la mascota de su maestro después de su muerte. También en Tombuctú, de Paul Auster, la amistad entre un perro y un humano, pero en este caso el añorado escritor nos cuenta esa relación desde el punto de vista del animal. Y de amistad también nos habla Frankie, de J.M. Gutsch y Maxim Leo, esta vez con un gato y un hombre deprimido en el centro de la historia.



Al igual que en Tombuctú, hay autores que han buscado meterse en la piel de los animales para intentar ver el mundo como ellos. Un ejemplo ya clásico es Soy un gato, de Natsume Sōseki, que se sirve de un felino para diseccionar a la sociedad tokiota. Para finalizar, una obra de no ficción que ahonda desde distintas vías (científica, psicológica y personal) sobre nuestra relación con otras especies: Lo que no sé de los animales, de Jenny Diski.

