Narrar una ciudad: entrevista con Jaume Collboni, alcalde de Barcelona
A principios de este mes, la Feria Internacional del Libro de Guadalajara cerraba su edición con mayor afluencia de público, casi un millón de personas, y en la que el país invitado de honor, en esta ocasión, no era tal. Barcelona recibió ese reconocimiento, lo que da muestras de la entidad literaria de la ciudad y su relación con los creadores de Latinoamérica.
En ese marco, el alcalde Jaume Collboni presentó Narra Barcelona, un programa de becas realizado en colaboración con de Casa Amèrica Catalunya y del Consorcio de Bibliotecas de Barcelona, y que permitirá que autores o autoras realicen una residencia en la ciudad para crear una obra literaria que, posteriormente, se publicará en una colección propia. Hablamos con Collboni de esta nueva iniciativa, y nos recomienda algunos de sus libros favoritos.
Video: entrevista y libros recomendados de Jaume Collboni
Hay muchas maneras de explicar la importancia literaria de Barcelona, pero pocos datos tan elocuentes como el que muestra Jaume Collboni: “Las editoriales con sede en nuestra ciudad publican cerca del 80% de lo que se edita en el mundo en castellano”, explica el alcalde de Barcelona. “Con la presencia de Barcelona como invitado de honor de la FIL, nuestra ilusión ha sido subrayar nuestra capitalidad editorial en el libro en lengua española. Además, tenemos una relación muy fraterna, histórica, sentimental y emocional con México y con toda Latinoamérica. Con México, de forma especial, por todo el exilio republicano que acogió aquel país. Creo que hemos subrayado nuestra vocación de capital editorial del mundo hispanohablante y también hemos conseguido reforzar esos vínculos transatlánticos entre la cultura catalana, barcelonesa, y la mexicana y latinoamericana”.
Por ese motivo, la FIL de Guadalajara era el escenario ideal para presentar Narra Barcelona, un programa de becas diferente al habitual. “Desde el año 2017 hemos becado a 280 autores y autoras, invirtiendo más de un millón y medio de euros en estos programas, pero nunca habíamos hecho una beca de residencia para escritores de terceros países”, cuenta. “Nos pareció que, con ocasión de la presencia de Barcelona en la FIL, era una forma bonita de reconectar con la mitología que tiene la ciudad con los escritores latinoamericanos, especialmente con el boom de los años 70. Nos interesaba proyectar la ciudad no solo desde el punto de vista editorial o cultural, sino que vinieran a narrarnos y a explicar Barcelona a Latinoamérica”.
Vivir una ciudad para contarla
A diferencia de otros programas de residencia, Narra Barcelona se plantea como una experiencia en el que el autor o autora seleccionado produzca una obra literaria que tenga que ver con el entorno en el que se va a vivir durante tres meses. “La idea es que haya una convivencia de estos autores con la Barcelona contemporánea. No hay un tema específico; lo que brindamos es la Barcelona actual, con sus contradicciones, éxitos, fracasos, luces y sombras”, detalla Collboni. “El estilo narrativo lo elige el autor, pero debe aproximar la realidad de la Barcelona contemporánea a los lectores de Latinoamérica, más allá de los tópicos y del mito de la Barcelona de los años 70. Hoy existe una Barcelona contemporánea muy interesante por muchos otros motivos culturales y creativos, y nos parece muy interesante que se produzca esa inmersión en nuestra realidad”.
Barcelona no solo ha sido el escenario de grandes novelas, sino que nos interesa también la Barcelona como sujeto
Las obras resultantes de Narra Barcelona, además formarán parte de una colección propia. “La vocación es hacer una colección con continuidad en el tiempo, lo que nos permitirá trazar una historia de los relatos sobre nuestra ciudad. Es una bonita tradición que nos gusta recuperar: hacer colecciones temáticas, en este caso sobre Barcelona. Barcelona no solo ha sido el escenario de grandes novelas o ensayos, sino que nos interesa también la Barcelona como sujeto, como protagonista de estas narraciones”.
Una ciudad lectora
Narra barcelona se inscribe además en una política cultural muy activa en una ciudad en la que la lectura es parte básica de su vida. “Tenemos índices de lectura muy altos; el 40% de la población tiene carné de las bibliotecas públicas. De 1,7 millones de habitantes, casi 700.000 personas tienen carné. Es la primera asociación en número de miembros de la ciudad. Eso habla de un gran hábito y tradición bibliotecaria”, apunta su alcalde. “En una biblioteca pública pasan muchas cosas: no solo hay lectura y préstamo de libros, sino actividades temáticas, especializaciones. Las 42 bibliotecas públicas nos ayudan a construir comunidad en muchos barrios. Ahora vamos a construir, por fin, la gran biblioteca central del Estado en Barcelona después de 20 años, y seguimos construyendo bibliotecas”.
El Ayuntamiento de Barcelona, por último, también tiene una tradición editora. “Tenemos 12 colecciones en marcha desde hace años, y cada año publicamos unos 5 o 6 libros de diferentes temáticas y reediciones. Además, acabamos de inaugurar nuestra librería, Ve da Barcelona (que traducido sería "viene de Barcelona"), en el mercado del Born. Es un gran expositor de nuestras obras, un espacio donde se puede comprar, leer y comer. Hace un par de semanas que lo inauguramos; es muy accesible y ofrece una experiencia de visita muy interesante. Hemos creado rincones de la creatividad barcelonesa: diseño, moda, gastronomía... porque nos gusta fusionar las creatividades de la ciudad”.
Libros recomendados de Jaume Collboni
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A mí me interesa mucho; tuve la suerte de conocer al Papa y viví una experiencia similar a la que describe el autor: la conversación con él y el procesamiento posterior de esa información como persona agnóstica. Me interesaba ver ese paralelismo. Es un libro muy sugerente para entender qué significa la figura del Papa hoy. Algunas cosas cambiaron para mí después de esa conversación, como también le pasó a Javier. Es un ejercicio de introspección sobre cómo los no creyentes miramos el fenómeno religioso, el papel de la Iglesia Católica y la fuerza prescriptora y de referencia que tiene un Papa. En un contexto de desafección, preeminencia del discurso del odio y polarización, creo que el papado de Francisco ha sido un bálsamo y un referente para mucha gente no católica, entre la que me cuento. El libro, además de un ensayo novelado, te permite conocer por dentro un país tan lejano como Mongolia. Ese "ir a los márgenes", que es lo que hace el Papa, es donde hay cosas más interesantes.
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Y, en el ámbito del ensayo, releí (y regalé a colaboradores que fueron a la FIL) un libro de referencia que también recomiendo, casi terapéutico. Para mí es uno de los primeros grandes libros de autoayuda de la filosofía contemporánea: "El arte del buen vivir", de Schopenhauer. En general, Schopenhauer es bastante sencillo de leer y entender.
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Otro que estoy releyendo es "La sombra del viento", de Carlos Ruiz Zafón. Las grandes editoriales barcelonesas lo han relanzado también en la FIL. Con ese fantástico Cementerio de los Libros Olvidados; ubicado cerca de aquí, en el Barrio Gótico, me parece una de las obras maestras contemporáneas en lengua castellana.
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Hablando de Barcelona, recomiendo el último libro de Jordi Amat, "Las batallas de Barcelona". Es un buen ejemplo de cómo se puede explicar la ciudad viviendo en ella. Jordi Amat es barcelonés 100%, y aborda las contradicciones y retos de las grandes ciudades hoy: la gentrificación, las nuevas desigualdades y, a la vez, la contradicción de ser una ciudad abierta al mundo, con vocación internacional, pero que quiere preservar su identidad. En este libro se encuentra esa disyuntiva muy propia de Barcelona: entre la Barcelona pueblo, de escala humana y proximidad, y esa Barcelona que sueña con ser protagonista en Latinoamérica, albergar grandes editoriales o empresas tecnológicas y tener una proyección internacional tan potente.