Especial Maternidades literarias, el boom que no cesa
Pasó de ser un tema casi silenciado, ausente del gran canon literario, a ser una constante en las novedades editoriales. Hace algo más de un lustro, la maternidad, o la elección de no ejercerla, comenzó a salir a la luz literaria y a mostrarse como un tema que ofrecía tantas variantes como autoras que lo abordaban. El auge de la autoficción, en un momento en el que parecía que la vivencia en primera persona le ganaba el terreno a la ficción pura, también puso de su lado.
Fue el momento en el que llegaron obras como Quién quiere ser madre, de Silvia Nanclares, La mejor madre del mundo, de Nuria Labari o La primera mano que sostuvo la mía, Maggie O'Farrell, entre muchas otras obras. Pasado el tiempo, si alguien vaticinaba que estábamos ante una tendencia de temporada, haría bien en asumir su error. Los libros en los que la maternidad, o la relación entre madres e hijas, están en el centro son todavía una constante.
Un ejemplo de ello es Mi trabajo, cuyo título también nos recuerda a un texto clave sobre la maternidad, Un trabajo para toda la vida, de Rachel Cusk. En su libro, la noruega Olga Ravn expone los cambios que llegan al ser madre y los miedos: a no estar a la altura, a la responsabilidad o a ser absorbida por la condición de madre y que opaque todo lo demás. La maternidad, así como la vida en pareja, están muy presentes en la deriva de la protagonista de Los templos solemnes, de Glòria de Castro. Y antes se publicó Nuestras madres, de Gemma Ruiz Palà, un retrato de una generación de madres, nacidas durante la dictadura, a las que la sociedad les negó poder desarrollarse libremente.
Mención aparte merecen las relaciones entre madres e hijas, casi ya un subgénero auspiciado por obras como la influyente Apegos feroces, de Vivian Gornick. Desde el rencor y la búsqueda del perdón en El verano en que mi madre tuvo los ojos verdes, de Tatiana Ţîbuleac, a la tragicomedia de El club de los mentirosos, de Mary Karr, dos libros que se han convertido en pequeños longsellers en los últimos años, El cuerpo en el que nací, de Guadalupe Nettel o Azúcar quemado, de Avni Doshi. Visiones sobre unas relaciones complejas y llenas de claroscuros que nos indican que todavía queda mucho por explorar y escribir sobre el universo materno.