10 libros para detectar el postureo literario
Dime de qué libros presumes y te diré de lo que careces.

“Si vas a casa de alguien y no tiene libros, no te lo folles”, es una frase de John Waters que se ha popularizado en los últimos tiempos. Un lema que, dicen las malas lenguas, sirve también para detectar a los adictos al postureo literario. Esos que fingen haber leído grandes obras que jamás abrieron o que no lograron terminar. Los mismos que jamás reconocerán haber disfrutado de algunos de los títulos que se agolpan en las estanterías de los más vendidos. Hoy en Librotea hemos confeccionado una lista que te servirá para detectar a los amantes del postureo. Elogiará los siete tomos de
En busca del tiempo perdido, de Marcel Proust, pero sus comentarios no irán mucho más allá de citar a la famosa magdalena de Proust, sin ni siquiera tener muy claro qué significa en realidad. Otro libro que recibirá grandes alabanzas será
Guerra y Paz, aunque no haya llegado ni a la página cien de la monumental novela de Tolstói. Y algo similar sucede con el
Ulises, de Joyce, otro título ampliamente referenciado, pero mucho menos leído. En las series de Aron Sorkin se repiten las citas de
El Quijote, lo que ha convertido a la obra de Cervantes no solo en la novela más importante de la literatura española, también en algo
coolque hay que aparentar haber leído para ser un buen postureta. Especie a la que también reconocerás por su afición a las novelas de Murakami, a los que escucharás hablar del mito que rodea a Thomas Pynchon y elogiar
La broma infinita, de Foster Wallace. Da igual que nunca se haya acercado a la obra de ninguno.
El segundo sexo, de Simone de Beauvoir, es otro título que detectarás en la librería de cualquier aficionado al postureo, seguramente junto a un ejemplar de
La náusea, de Sartre. Y negarán haber leído la trilogía de
Cincuenta sombras de Grey, esos tres libros que permanecen sepultados al fondo de la estantería. Escondidos por vergüenza.
10 libros para detectar el postureo literario
-
Un placer de lectura, este clásico tiene todo lo que tiene que tener una novela, tanto en los grandes términos como en los pequeños detalles.
-
Si se trata de perder la inocencia en cualquier ámbito, este es el libro, de hecho podría titularse: “cómo acabar de una vez por todas con las ilusiones”
-
El Ulises de Joyce me creó muchos problemas porque me provocó una irritación muy estimulante sobre el discurso narrativo e incluso escribí varias versiones de un mismo capítulo a modo de experimentación.
-
Este libro es un reto. Muchos lectores lo abandonan antes de la mitad, le llaman “realismo delirante”. Son demasiadas voces sin concesiones para el lector. Eso me gusta mucho, que los libros te presenten retos, que te obliguen a pensar. Es absurdo y te deja ver ese otro relato que acontece tras la Segunda Guerra Mundial, es decir, la posguerra. Plantea la desolación de una manera hilarante.
-
Un libro visionario en el que la autora sueña ya a la mujer contemporánea y sus revoluciones.
-
No sólo me ha gustado, sino que ya está entre mis libros favoritos de siempre. Pero es complicado de recomendar. Estuve a punto de dejarlo hasta llevar unas 150 páginas. Una vez dentro de su universo, no pude salir (y aún no he salido).
-
Alberto: Sexo, amor y muerte. Una historia oscura y profunda sobre unos personajes que se niegan a vivir una vida normal y común aunque juegan con ella. Está escrito de una manera que casi puedes tocar a los personajes y oler cada paisaje que aparece en el libro.
-
El gran viaje de la literatura española y, junto con la 'Odisea', de la universal.
-
Tuve un maestro inolvidable, Rogelio Ríos, quien fuera seminarista y después profesor. Llegó de Zacatecas y me dio clases de literatura en bachillerato. Nos empezó a hablar de los libros de la época y gracias a él llegué a La náusea, que abrió una puerta para seguir leyendo.
-
Lo ames o lo odies, este libro ha hecho mucho bien a los escritores de novela romántica y a sus lectores, y ha ayudado a millones de mujeres a sentirse liberadas de una forma que no se habían sentido antes. Siempre amaré esta serie.
- Ver más contenido